"El inquilino", de Javier Cercas

Les comparto mi opinión acerca de "El inquilino", de Javier Cercas 🚪🗝️

4/5 🌟

Mario Rota es un filólogo italiano que, becado por a su país, se desempeña apoyando al departamento de filología italiana en una universidad norteamericana. Su apacible vida comenzará a llenarse de pequeños contratiempos… un tobillo torcido y un nuevo vecino, Daniel Berkowickz (que comenzará a trabajar en la misma universidad), son el comienzo de una suma de contrariedades que irán apareciendo dentro de su vida personal y profesional.

A veces necesitamos de una fuerza externa que nos lleve a replantearnos el rumbo de nuestra vida: en el caso de Mario, esta se verá encarnada en Berkowickz, un hombre de mucho talento y prestigio, que resulta rápidamente admirado entre sus nuevos compañeros de trabajo y se convierte en el alma de todas las fiestas, desplazándolo paulatinamente en todos los frentes, incluido el sentimental. Viene a ser una especie de voz interior que lo obliga a despertar y tomar conciencia acerca de que está viviendo “en piloto automático”.

Es un libro de capítulos cortos con mucho diálogo y una narración muy fluida. A lo largo de las pocas páginas que conforman la novela, surgen diferentes tópicos interesantes, como una dura crítica a las elites universitarias que se centran más en la apariencia y el prestigio, en la cantidad de artículos publicados, que en la calidad de la persona como investigador o profesor. El modo de escribir del autor consigue que nos planteemos si no estamos, en el fondo, pasando por la misma situación que el protagonista, si estaremos durmiéndonos en los laureles y desaprovechando incontables oportunidades. Mejor actuemos rápido, antes de que aparezca un Berkowickz en nuestro camino…

En el nuevo prólogo que acompaña esta reedición, Cercas nos cuenta que escribió “El inquilino” en 1988, cuando contaba con 26 años y vivía, gracias a una beca, en Estados Unidos. Alejado de todo, escribió una novela en la que reconoce haberse encontrado, y hacerlo aún a día de hoy. Es breve y se lee muy rápido. Anímense, que vale la pena.